Andan muy ocupados estos días los medios de comunicación desgranando alabanzas y panegíricos a este hombre digno que supo aprender de los errores y conducir la transición de Sudáfrica de un régimen de brutal segregación racial a un régimen de democracia. No voy a insistir en lo que todos conocen, no me siento con humor, ni me da la gana decir más de lo mismo, dejemos a Mandela en su merecida gloria, quede simplemente en nuestro recuerdo su edificante ejemplo.
Sólo quiero recordar en estos momentos a otro sudafricano ilustre, de su misma etnia, que al contrario que Mandela ha sido vilipendiado en los medios, este hombre es Thabo Mbeki, que sucedió a Mandela en la presidencia de Sudáfrica entre 1999 y 2008, auténtico paladín de la lucha contra otros “apartheid”, como el “apartheid global del sida”.
No ha habido ningún presidente en el mundo que haya sabido, como él, estar a la altura de su cargo, y plantar cara ante esta epidemia de terror y negocio fraudulento, al igual que lo estuvo ante otros problemas que afectan no sólo a su país, Sudáfrica, sino a gran parte de la humanidad, sobre todo la humanidad con menos recursos, como la pelea con las multinacionales por la cuestión de las patentes de los medicamentos esenciales, un hombre preocupado por devolver la dignidad al continente africano, un hombre al que le queda mucho todavía por hacer y que dará mucho de que hablar.
¿Y cuál fue el pecado de este hombre íntegro? Sencillamente ser un presidente a la altura de sus responsabilidades y de los problemas de todo tipo que tuvo que afrontar, empezando por plantarse ante la voracidad de las multinacionales farmacéuticas y negarse a seguir ejerciendo la censura sobre unos investigadores que llevan años denunciando el fraude del sida y pidiendo un debate. Y Mbeki lo hizo, promovió ese debate, debate que los defensores de la teoría dominante boicotearon, con lo que quedó en evidencia lo que ya sabíamos desde hacía lustros: que los defensores de esta teoría genocida no saben defenderse en un debate libre y abierto, y que si esta visión sigue todavía vigente es gracias a la mordaza y a la censura, junto con las coacciones y los sobornos que entraña. El sida, además de ser hijo de la corrupción es obra de mentes enfermas, de cuyo refinamiento el mismo Hitler y sus colaboradores tendrían mucho que aprender.
La carta que envió Mbeki a los principales líderes mundiales en vísperas de la Conferencia Internacional de Sida Durban, donde manifestó entre otros extremos que no estaba dispuesto a ejercer la censura que se le pedía sobre los científicos críticos con el actual modelo vih-sida, es todo un modelo de dignidad y de respeto.
Su postura le mereció ser atacado de modo virulento en la principal prensa mundial, incluido nuestro inefable diario EL PAÍS, las multinacionales farmacéuticas y los potentes grupos financieros que están detrás movieron rápidamente su peones, no iban a permitir que nadie les estropeara el negocio.
Joan Shenton le realizó en fechas anteriores a la Conferencia Internacional de Durban de 2006 una entrevista que podéis ver aquí, pero el compromiso y la integridad de Thabo Mbeki abarcó otros muchos temas de interés africano y mundial, como por ejemplo su negativa a secundar la invasión de Zimbawe, que le proponían ciertos destacados líderes como Tony Blair, o la denuncia, más reciente, de la intervención interesada de ciertos países en Libia, y otros muchos temas que sería largo exponer aquí.
Como personas afectadas directamente por este fraude global del sida no dejamos de ver a Thabo Mbeki como lo que es, un hombre digno, íntegro, responsable, el único presidente en todo el mundo que ha reaccionado valientemente ante este engendro, estamos convencidos de que su historia no finaliza aquí y que le queda mucho por decir todavía.
Gracias Thabo Mbeki, te deseamos una larga y fructífera vida.
Comentarios
QUÈ BUENA EXPOSICIÒN, GRACIAS MANUEL LO COMPARTIRÈ.-TRATO DE DIUNDIR EN MEDIOS ...
Por lo poco que he podido entender, parece que en el homenaje a Mandela, Thabo Mbeki, digno heredero de su espíritu, fue aclamado por el público, que coreó su nombre, por otra parte, el corrupto presidente actual J. Zuma fue interrumpido con silvidos en varias ocasiones, según comenta Fintan Dunne en su página: http://fintandunne.blogspot.it/2013/12/Mandelas-Conscience-Lives-In...
si quedaran mas personas asi...como mejoraria el mundo!!
muy bueno!
Gracias por el texto es muy esperanzador , todavía quedan personas decentes en este mundo.
Thabo Mbeki: " No condenaremos a muerte a nuestro pueblo abandonando la búsqueda de respuestas específicas (...)"
manuel muy acertado tu comentario y todo mi agradecimiento a thabo mbbeky el primer presidente de un pais en palnatarle cara a tods esta pandilla de mangantes y gente de mal vivir