LO QUE DEBES SABER
El modo como la “ciencia del vih-sida” detecta los supuestos contagios, sea por la vía que sea (sanguínea, sexual…), es el mal llamado test de vih (en referencia al test ELISA, llamado de exploración y al W. Blot, llamado de confirmación).
Pues bien, hay una cosa, mejor dicho varias, que todo el mundo, en especial aquellas personas que han dado positivo en este fraude de test llamado de vih, deberían saber:
- 1 Estos tests no detectan, ni pueden detectar, al ente (todo parece indicar que imaginario), llamado vih. Más adelante se explica por qué.
- 2 Se trata, como se explica también más adelante, de un test totalmente inespecífico, que detecta aumentos de anticuerpos en sangre, anticuerpos que al parecer son de todo tipo o de muchos tipos.
- 3 Lo anterior echa por tierra el cuento chino de los llamados “grupos con prácticas de riesgo”, pues al final, la única práctica de riesgo aquí, sea voluntaria o no, es hacerse el test, según se explicará.
- 4 Resultar positivo en esos tests es más fácil de lo que se pueda pensar, sin necesidad de práctica de riesgo ninguna: sólo tienes que tener un sistema inmune sano, es decir, un sistema inmune que reaccione normalmente produciendo anticuerpos ante situaciones que lo estresen o estimulen y hacerse ese test veinte días o un mes después de haber pasado por una situación que estrese o estimule el sistema inmune, como un contacto infeccioso del tipo que sea o una vacunación, bastando para ello una simple gripe semanas antes de hacerse el test.
- 5 Un ejemplo que tira irremediablemente por tierra el mito de los grupos de prácticas de riesgo (homosexuales, adictos drogas vía iv, relaciones sexuales…), es lo que pasa con los niños hijos de madres seronegativas, (por supuesto, niños que no hubieran recibido transfusiones). Según la teoría del virus del sida, se trata del grupo poblacional donde no cabría esperar ningún resultado positivo, lo que no es el caso, ya que hemos visto casos de niños donde se dan estas circunstancias de no tener nada que ver con ninguna de las consabidas situaciones de riesgo y sin embargo resultar positivos en el test, en unos casos tras una infección (puedes ver aquí uno de estos casos) y en otros posiblemente debido a una de las múltiples vacunaciones que se llevan a cabo en estas edades. La razón de que estos casos no sean más frecuentes, o más conocidos, es porque en los niños no se suelen pedir estos tests, al contrario de lo que sucede con los llamados grupos con prácticas de riesgo, homosexuales, adictos drogas vía iv...donde hay más casos de resultados positivos sencillamente porque son grupos donde el test se pide más. En resumen, que si ahora nos diera por hacerle el test de vih a cualquier niño un mes después de una infección o de una vacunación, nos íbamos a quedar asustados con la cantidad de positivos.
En cuanto al supuesto aumento en el llamado sida heterosexual no hace más que traducir el hecho de la generalización de ese test, a más tests, más resultados positivos y si no eres homosexaual o adicto a drogas iv... se supondrá que te has contagiado por relaciones sexuales.
EL TEST NO DETECTA EL CONTACTO CON EL VIRUS
Profundizando un poco más en este tema de los tests mal llamados de vih, mal llamados porque si algo no detectan estos tests, independientemente de cuál sea su modalidad, (sean test de antígenos, de anticuerpos, como el ELISA y el W. Blot, tests de carga viral con PCR, o tests de últimísima generación), es el contacto con el ente al que han dado en llamar “virus VIH”.
Que los tests no sirven para detectar ese “virus” lo reconocen las propias casas farmacéuticas que comercializan esos tests en los folletos de instrucciones, ahora bien, no lo dicen claramente pues los tests no se venderían, pero al mismo tiempo se ven obligadas a decirlo para precaverse de demandas judiciales. ¿Solución? Pues decirlo, pero de un modo oscuro, muy técnico, que pocos entiendan. Así, este es el aviso que hacen en los folletos de instrucciones de los tests (si bien esto se refiere a los tests ELISA, como se verá más adelante, esto que se dice para los tests ELISA es extensible a absolutamente todos los tests relacionados con el supuesto virus): “De momento no hay estándard reconocido para establecer la presencia de anticuerpos vih en sangre humana”.
Es importante entender qué es el estándar y lo que implica la frase “de momento no hay estándar reconocido para establecer la presencia de anticuerpos anti vih en sangre humana”.
Cuando se diseña un test que nos va a servir para la detección de un virus (de tal modo que si da positivo se va a considerar a la persona como infectada y con capacidad de contagiar), tenemos que comprobar, antes de usar ese test en la población, que en las personas que dan positivo se encuentra el virus en su sangre. Eso quiere decir que el estándar de un test, aquello con lo que el test se valida, es el propio virus. Al decir que no existe estándar lo que se nos está diciendo es que los tests no se han validado, antes de usarlos en la gente, con la propia detección del virus en la sangre de quienes dan positivo, en una palabra que los tests no sirven para la finalidad que se nos dice. La respuesta a este enorme absurdo hace referencia a otro hecho clave y fundamental: que el mentado virus nunca se ha visto en la sangre humana, es decir, nadie hasta la fecha ha aportado ninguna prueba sólida de su existencia.
Pero, como lo que dice la compañía Abbot, en referencia al test ELISA, es algo que sucede con todos los tipos de tests, sean de anticuerpos, de antígenos o de carga viral con PCR, de primera o de muy última generación, no existe ningún test que pueda decirte si estás infectado por el ente que llaman VIH, como declara el Dr Rodney Richards, que trabajó en la elaboración de los primeros tests de vih que se comercializaron.
SI NO DETECTA EL VIRUS, ¿QUÉ DETECTA ENTONCES EL TEST DE VIH?
En la misma entrevista citada el Dr Rodney Richards explica qué es lo que el test detecta (aquí nos referimos a los más usados, que son los tests de anticuerpos ELISA y W Blot), y lo que detectan estos tests, según él, es un aumento en sangre de unas proteínas llamadas gammaglobulinas, ¿Y qué son las gammaglobulinas? Pues muy sencillo: los anticuerpos son gammaglobulinas, así que estos tests detectan aumentos en sangre de la tasa de anticuerpos.
A nosotros siempre nos dijeron que el test detectaba anticuerpos contra el vih con un altísimo grado de fiabilidad y ahora resulta que el test no sólo no detecta anticuerpos contra el vih sino que es un test totalmente inespecífico que detecta aumentos en sangre de anticuerpos de todo tipo o de muchos tipos.
Esto se corresponde con la relación de causas, documentadas en la literatura médica, que pueden dar resultados positivos en esos tests de anticuerpos. Cuando uno echa un vistazo por encima a esas causas una cosa salta a la vista, que en general (aunque no son las únicas) se trata de situaciones donde cabe esperar un aumento en la tasa de anticuerpos en sangre (contactos infecciosos varios, vacunaciones, enfermedades autoinmunes, contacto con proteínas extrañas…).
EL EXPERIMENTO DEL DR GIRALDO
El Dr Roberto Giraldo (q. e. p. d.), eminente médico colombiano experto en inmunodeficiencias, llevó a cabo un interesantísimo experimento de laboratorio que corrobora parte de lo expuesto hasta aquí con respecto al test (http://www.free-news.org/rgiral01.htm).
El Dr Giraldo se fijó en que los tests de anticuerpos para las distintas enfermedades (hepatitis, herpes, CMV…), que consisten en poner en contacto el suero que queremos analizar con las proteínas antigénicas o material del virus, se llevan a cabo con suero sin diluir o con diluciones muy bajas, mientras que en el caso de los tests de anticuerpos para el vih, como es el caso del test ELISA, se realizan con el suero muy diluido en soluciones muy altas. Giraldo se preguntó qué pasaría si, en vez de usar el suero muy diluido en disoluciones muy altas, como se hace habitualmente en el test de vih, se usara el suero sin diluir, así que llevó a cabo el experimento y resultó que absolutamente todas las muestras daban positivo, lo que implica que el test detecta algo que todos tenemos, (¿Anticuerpos de todo tipo o de muchos tipos?). Ahora bien, si llevamos a cabo el análisis como se hace habitualmente con estos tests, es decir, con diluciones muy altas, y resulta que sólo unos pocos dan positivo, ¿Qué significa eso? Pues significa que las personas que dan positivo en los tests de vih tienen en su sangre lo mismo que todo el mundo (posiblemente, como se ha dicho, anticuerpos de todo tipo o de muchos tipos), sólo que en mayor cantidad.
TODA PERSONA QUE HA SIDO ETIQUETADA COMO VIH+ DEBERÍA REPETIRSE EL TEST
De todo lo expuesto hasta aquí con relación a lo que llaman test de vih se deduce que si a todo el mundo se nos hiciera el test de vih a lo largo de la vida (en especial si se nos hiciera tras contactos infeccioso o tras vacunaciónes), es muy posible que en un momento dado todos resultáramos positivos en ese fraude de test.
Decir también que cabe la posibilidad de que ese test, que detecta aumentos en la tasa sanguínea de anticuerpos, pueda volverse negativo con el tiempo, si esa tasa de anticuerpos desciende, lo que significa que si bien desde el punto de vista de la salud no tiene mayor relevancia (sobre todo para quien está debidamente informado), sí que puede tener una gran trascendencia porque, además de abrir la posibilidad de plantar una denuncia por los daños ocasionados por esa etiqueta, va a suponer que los médicos te dejen de considerar como una persona “infectada por el vih”, con todo lo que eso implica, no hay que olvidar que la principal causa de muerte en las personas etiquetadas como vih+ son los errores y malas prácticas médicas que se llevan a cabo con ellas, en base a diagnósticos y tratamientos equivocados.
Aclarar que no se suelen aceptar las solicitudes para repetirse el test, bien sea porque ese test es considerado como muy fiable, o por temor a que pueda resultar negativo con las demandas que supondría, que creo es la principal razón, de ahí que, como dice el Dr Rasnick, una vez pasado un tiempo (mínimo ocho meses o un año), es buena práctica repetir el test en sitio distinto al de la primera vez.